La obesidad en México es considerado un verdadero problema de salud entre la población. Lo más grave son los padecimientos que esta suele provocar, además del bajo rendimiento personal y por supuesto, una esperanza de vida menor.
De acuerdo a la Secretaría de Salud de México, el 70% de la población nacional padece sobrepeso y una tercera parte sufre de obesidad. A partir de criterios establecidos por la OMS, una persona padece sobrepeso cuando; su índice de masa corporal (IMC) está entre 25.0 y 29.9 y obesidad grado I cuando el IMC está entre 30.0 y 34.9.
Las causas más vinculadas con la obesidad en el país, están relacionadas con el estilo de vida de los mexicanos, y estos son algunos factores relacionados con el aumento en el índice de masa corporal.
Algunas causas de la obesidad son:
- Mala alimentación
- Falta de educación nutrimental
- Sedentarismo
- No respetar los horarios de comida
- Falta de ingesta de frutas y verduras
- Consumo excesivo de bebidas alcohólicas
- Falta de ejercicio
Y aunque el origen del sobrepeso y la obesidad están muy directamente relacionados con el estilo de vida de personas, también puede relacionarse con aspectos clínicos, familiares, sociales, económicos, clínicos, y también nutricionales.
En cuanto al tema nutricional, hablamos del consumo excesivo de calorías, el consumo de una dieta poco balanceada, alto consumo de alimentos procesados, y que solo terminan por hacer que las personas presenten altos niveles de azúcar en la sangre, y colesterol.
Quizá no lo sabías, y podría llegar a parecerte extraño, pero otro de los factores que entran en juego para cuidar tu peso, es el desayuno.
Aprende a desayunar para cuidar tu peso
La alimentación es fundamental para cuidar tu peso. Puedes hacer muchas rutinas de ejercicio, y muchas abdominales, pero de nada servirán si no aprendes a comer de forma correcta. Y todo empieza con el desayuno.
Como ya lo has escuchado, el desayuno es la comida más importante del día. Y eso lo afirman los expertos, pues, todo se debe a que vienes de alrededor de 8 horas sin nada en el estómago. Por lo tanto, necesitas despertar tu metabolismo con alimento. Desayunar te ayudará a tener suficiente energía durante las primeras horas del día, y sentirte satisfecho.
Y no solo se trata de ingerir los alimentos correctos para cuidar tu peso y perder grasa abdominal, algunos expertos sostienen que desayunar ayuda a reducir los riesgos de tener obesidad. Además, un desayuno balanceado puede prevenir que tu estomago se inflame, en especial si ingieres proteínas y alimentos ricos en fibra.
Evita estos 5 errores al desayunar para perder peso
1. No estás desayunando
Desayunar no solo regula el hambre y te da energía, también despierta el metabolismo, y también evita que consumas alimentos calóricos a lo largo del día.
Si no estás desayunando, probablemente sientas (a lo largo del día), que te falta energía, y hará que comas de más, y que por lo tanto, te den ganas de comer snacks poco saludables como frituras, harinas, y hasta tomar refresco.
2. Te olvidas de incluir proteína
Diversos estudios han encontrado que agregar proteína en cada comida no solo te ayuda a cuidar tu peso, disminuir tus medidas, también puede ayudarte a construir músculo de forma más fácil.
Si se trata de desayunar, es fundamental que agregues proteínas en cada porción. ¿Y porqué es importante ingerir proteína? Porque ayuda a evitar que los niveles de azúcar en la sangre se descontrolen.
La pechuga de pavo, huevos, yogurt griego, aguacate, salmón, y hasta atún, son alimentos ricos en proteína que puedes incluir como parte de tu desayuno.
3. Comes demasiado rápido
Si eres de los que acostumbran comer muy rápido y apenas mastican la comida, debes saber que esto te está provocando que tu estómago se inflame. Además, comer rápido y sin masticar, evita que sientas que tan lleno estás. Así que piénsalo antes de ingerir tus alimentos, y mastica de forma adecuada en cada bocado.
4. Te dejas llevar por los carbohidratos y bebidas “fat-free”
Si eres de las personas que suelen salir de casa con prisa, o sentarse a trabajar de inmediato sin prepararse un buen desayuno, olvídate de optar por llenar tu estómago con carbohidratos que suelen venderse como “fat-free”.
También, si eres de las personas que reemplazan un desayuno sólido, por un café con leche o bebidas preparadas, que de igual forma se venden como “fat-free”, olvídalo, no serán buena opción para cuidar tu peso y salud.
¿Por qué? porque los carbohidratos que se venden como fat-free pueden ser altos en calorías y muy bajos en proteínas, además de que no te van a permitir tener un desayuno balanceado.
5. Eliges alimentos pre-empacados
La prisa y la conveniencia han orillado a que muchas personas opten por elegir alimentos que vienen pre-empacados para comer en el trayecto a la oficina, o para comer como opción de desayuno mientras escuchan las primeras juntas del día, o responden a sus emails.
Debes saber que los alimentos que vienen pre-empacados tienen un alto contenido de sodio y azúcar. Por lo tanto no son saludables, y muchos menos recomendables. También, no solo ofrecen darte energía durante pocas horas, no aportan nutrientes esenciales, y solo harán que aumenten tus niveles de grasa en el área abdominal.
Otros factores que impiden el cuidado de tu salud y peso
Como ya lo mencionamos (y ya lo sabes) el desayuno es la comida más importante del día, así como cuidar lo que comes. No solo se trata de hacer ejercicio, y de dormir bien, sino de medir tus porciones, y balancear cada uno de tus platos.
Desafortunadamente, datos de la OMS afirman que el 75% de la población mexicana es la que padece de más estrés y fatiga, lo que se relaciona directamente al sedentarismo, falta de tiempo para hacer ejercicio, y por lo tanto, cocinar sanamente.
Toma en cuenta que cuidar tu peso y alimentación es esencial para tener buena salud, pues la obesidad se asocia a poder desarrollar diabetes tipo 2, hipertensión arterial, enfermedades cardiovasculares (principalmente cardiopatía isquémica y los infartos cerebrales), enfermedades osteoarticulares y ciertos tipos de cáncer (mama, próstata y colon).
