De acuerdo a datos de Statista, las infecciones respiratorias agudas fueron los tipos de enfermedades más comunes en México durante el pasado 2019.
Tan solo durante ese año, se estimó un total de 24 millones de casos en nuestro país, siendo los niños de entre los 1 y 4 años de edad, y los adultos (entre los 25 y 44 años) los más afectados.
Es importante hablar acerca de esto porque estamos viviendo un panorama de incertidumbre por el gran aumento de infecciones por COVID-19, y se espera que esto se complique ante la llegada del frío invierno, además de la gripe y la influenza.
¿Qué es la influenza? Es una enfermedad respiratoria muy contagiosa, provocada principalmente por los virus de la influenza que infectan la nariz, la garganta y en algunos casos los pulmones.
La Organización Mundial de la Salud afirma que la influenza es una enfermedad respiratoria altamente contagiosa, ya que se adquiere por contacto directo, pero es curable si se detecta a tiempo.
Algunos de los síntomas de la influenza y el COVID-19 son parecidos, lo que generar confusiones, miedo, y hace que sea mucho más díficil diferenciar ambas enfermedades.
¿Cuáles son los síntomas de la influenza?
La influenza puede causar una enfermedad leve o grave, pero en ocasiones puede llevar a la muerte. Es diferente al resfriado, y por lo general, las personas que la padecen comienzan a manifestar estos síntomas:
- Fiebre (con escalofríos normalmente, pero no todas las personas la presentan)
- Tos
- Dolor de garganta
- Secreción o congestión nasal
- Dolores musculares o corporales
- Dolor de cabeza
- Cansancio
- Vómito y diarrea (esto es más común en los niños)
Complicaciones por la influenza
La mayoría de las personas que contraen la influenza se recuperarán en un periodo que va desde unos pocos días hasta menos de dos semanas. Por otro lado, una de las complicaciones más fuertes que desarrollan las personas que padecen influenza, es la neumonía, y esto es muy peligroso.
Algunos otros ejemplos de las complicaciones por la influenza están relacionadas a infecciones sinusales y del oído, pero son moderadas.
Otras posibles complicaciones graves desencadenadas por la influenza pueden ser la inflamación del tejido que rodea el corazón, el tejido cerebral, o el tejido muscular, así como la insuficiencia renal y respiratoria.
Una infección de las vías respiratorias por el virus de la influenza puede desencadenar una respuesta inflamatoria en el cuerpo y derivar en una sepsis, que es una respuesta a infecciones que ponen en peligro la vida.
También, la influenza puede empeorar otros problemas de salud crónicos, como el asma, y las personas con enfermedades cardiacas pueden ponerse más graves al presentar un cuadro por influenza.
¿Quienes son las personas con alto riesgo de contraer influenza?
Cualquiera puede contraer la influenza (incluso las personas sanas) y los problemas de salud graves a causa de la influenza pueden surgir a cualquier edad. Sin embargo, las personas de 65 años de edad o quienes padecen ciertas afecciones crónicas (como el asma, la diabetes o enfermedades cardiacas), las mujeres embarazadas y los niños menores de 2 años, son grupos de alto riesgo.
Las personas que experimentan estos signos de advertencia deberían recibir atención médica o consulta en línea de inmediato.
En los niños
- Respiración acelerada o problemas para respirar
- Coloración azulada en los labios o el rostro
- Dolor de pecho
- Dolor muscular intenso (el niño puede estarse negando a caminar)
- Deshidratación (no orina por 8 horas, tiene la boca seca y al llorar no tiene lágrimas)
- No estar alerta ni cuando está despierto
- Convulsiones
- Fiebre por encima de los 37°
- En el caso de niños menores de 12 semanas, cualquier cuadro febril
- Fiebre o tos que mejora pero reincide o empeora
- Agravamiento de las afecciones crónicas
En los adultos
- Dificultad para respirar o falta de aire
- Dolor o presión constante en el pecho o abdomen
- Mareos persistentes, confusión, dificultad para despertarse
- Convulsiones
- No orina
- Dolor muscular intenso
- Debilidad o inestabilidad intensa
- Fiebre o tos que mejora pero reincide o empeora
- Agravamiento de las afecciones crónicas
Las recomendaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para evitar el contagio incluyen aplicar la vacuna anualmente y son algunas de las siguientes:
- Evita el contacto cercano con gente enferma.
- Cúbrete la boca con el codo o con un pañuelo al toser o estornudar.
- Evita tocarte nariz, ojos y boca.
- Lávate las manos frecuentemente con agua y jabón.
- Desinfecta cualquier superficie que esté al alcance de muchas personas como: grifos, manijas de puertas/inodoros, interruptores de luz.
- Duerme bien y alimentate sanamente.
Recuerda que las pruebas de diagnóstico pueden ayudar a determinar si padeces influenza o COVID-19.
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