Es enero, el orden parece regresar a nuestras vidas después de haber pausado los buenos hábitos, el descanso, y el ejercicio. Este es el mes en que mucha gente empieza a alinearse con sus objetivos tanto de fitness, salud, y financieros.
Quizá uno de los objetivos que más “obsesiona” a la gente es todo lo relacionado a bajar de peso; tomar suplementos, tés, hacer ejercicio, dejar de comer ciertos alimentos, y hasta practicar el ayuno intermitente.
No basta con empezar a comer bien y hacer ejercicio, debes saber que también debes prestarle atención a los horarios en los que comes, en especial si quieres bajar de peso.
Llevar una buena alimentación es fundamental para bajar de peso, pero comer en las horas que son recomendadas que los expertos en nutrición, te ayudará.
Aunque cada caloría cuenta, para mantener un peso ideal es muy importante saber en qué horarios debes alimentarte para mantener un peso ideal.
Y es que de acuerdo con el estudio por la Universidad de Harvard, retrasar las comidas cuatro horas desencadena efectos fisiológicos que probablemente conducirán a aumentar el riesgo de padecer obesidad.
La investigación también descubrió que comer muy tarde impide adelgazar, ya que duplica las probabilidades de que te den ganas de comer más, lo que hará que sea mucho más difícil regular la elección de alimentos y la ingesta de calorías.
También, comer a deshoras disminuye la posibilidad de quemar calorías, sobretodo porque hace que el metabolismo se haga más lento y modifique ciertos genes que controlan los depósitos de grasa.
“Comer cuatro horas más tarde hace una diferencia significativa en cuanto a nuestros niveles de hambre, la forma en que quemamos calorías después de comer, y la forma en que almacenamos grasa”, afirmó Nina Vujović, investigadora principal del Programa de cronobiología médica en Brigham and Women’s.
Además, esta investigación también reveló que comer tarde afectó en los niveles de dos hormonas reguladoras del hambre en el cuerpo, la grelina y la leptina.
Estas dos hormonas son producidas en el estómago; la grelina le indica al cerebro cuando el cuerpo tiene hambre, mientras que la leptina es creada dentro de las células grasas, diciéndole al cerebro cuándo ya está lleno.
Esta investigación concluyó que retrasar todas las ingestas de alimentos cuatro horas disminuyó la hormona leptina en un 16% y aumentó la grenila en un 34%. También, los resultados sugieren que comer tarde provoca una disminución en el gasto de energía a lo largo de 24 horas.
Dejar de comer al menos 6 horas antes de ir a la cama ayudará a bajar de peso, pues cuando nuestro reloj interno detecta que deberíamos estar durmiendo, el metabolismo se hace más lento y la temperatura del cerebro baja como parte del proceso de eliminación de toxinas.
Ahora que sabes cuál es la mejor hora para comer, probablemente quieras empezar a cuidarte y adoptar mejores hábitos alimenticios.
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