Proteger tu salud mental es tan importante como hacer ejercicio, seguir una dieta, llevar hábitos saludables, y tomar medicamentos o un descanso cuando te da gripa, dolor de cabeza, o alguna lesión.
Pero, pasa que aún y a inicios de 2022 existen estigmas respecto a salud mental, así como gente que minimiza problemas como la depresión o la ansiedad, pero es porque no saben que a largo plazo, estos padecimientos conllevarán a riesgos de salud mucho mayores y peligrosos.
En realidad, la salud mental es un componente integral y esencial de la salud. La Organización Mundial de la Salud afirma que es un estado completo de bienestar físico, mental, y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades.
Entendamos también que el concepto de “salud mental” abarca también al área cognitiva, mientras la salud psicológica, engloba lo conductual, lo emocional, y también lo cognitivo.
En una entrevista realizada por Expansión, el profesor emérito de la Facultad de Psicología, de la UNAM, Juan José Sánchez Sosa, recalcó la importancia de reemplazar la vieja idea de que ir al psicólogo o al psiquiatra es porque uno está “loco”. Por ello es importante destacar, que estos trastornos deben ser considerados como enfermedades y deben tratarse como tal.
De la misma forma, el profesor señala que los síntomas originados por estos trastornos son consecuencia de una alteración biológica en las sustancias que regulan el funcionamiento cerebral.
Así que, si eres de esas personas que aún no se toman en serio el problema de la salud mental, conoces a alguien que padece ansiedad, depresión, estrés, o simplemente te interesa el tema. Sigue leyendo.
No se trata de tomarte un día entero de descanso (aunque si lo requieres, puedes hacerlo), sino de tomar pequeños “breaks” o momentos durante el día para dejar a un lado las preocupaciones y ocuparte de ti. Recuerda que si tú no estás bien, o no te sientes al 100%, será muy difícil que puedas concentrarte y ocuparte en tus actividades (sea cuales sean).
Ya he hablado anteriormente de esto en artículos anteriores, y debes recordar que existe también lo que se conoce como un día de salud mental, que se recomienda tomar para combatir el estrés, sentimientos de tristeza, o simplemente, recuperar energía.
Desconectarse de los correos electrónicos, de fechas de pago, pendientes, o pensamientos negativos es importante si quieres cuidar tu salud mental.
Si tu salud mental no está bien, eso quiere decir que quizá todo lo que te rodea tampoco lo está; puede que tu vida social, familiar, y hasta laboral, se esté desmoronando por esas preocupaciones o depresión que te aqueja y no te deja avanzar.
La depresión es un trastorno del estado de ánimo que no debe minimizarse, pues afecta tanto en sentimientos de tristeza, concentración, cambios en el apetito, confusión o lentitud en el pensamiento, y hasta en la dificultad para controlar las emociones, fatiga, poca energía, y falta de interés. En algunos casos, las personas que padecen depresión tienden a alejarse del trabajo de forma prolongada. Estas personas no muestran interés en regresar a sus actividades y mucho menos en tener contacto social.
Es importante que las personas que padecen depresión busquen atención especializada. Solo un profesional de la salud podría ayudarle a enfrentar esta enfermedad con alguna terapia o algún medicamento (en caso de que se lleve un tratamiento psiquiátrico).
Primero que nada; no sientas miedo o vergüenza de aceptar que necesitas un break para poner tus pensamientos en orden, y mucho menos, para recargar energía. Si ya identificaste, o al leer este artículo te diste cuenta que has enfrentado síntomas o sensaciones como la ansiedad, estrés al máximo, o mucha tristeza, es momento de darte ese break para que puedas regresar a tu vida habitual con mucha energía.
También, hay que considerar que tomarse un break o un día para cuidar la salud mental, no debería ser diferente a ausentarse del trabajo por un motivo de enfermedad como una gripe o tos.
Tomar un break no implica que tengas que ausentarte todo el día o varias semanas de tus responsabilidades laborales, puedes acercarte a tu jefe para explicarle que estás atravesando por un momento complicado, y que deseas darle una solución a todo esto.
Asimismo, puedes buscar la forma de encontrar pequeños “huecos” dentro de tu agenda laboral (ya sea en la oficina o vía home office) para desconectarse unos minutos de la computadora, salir a caminar unos minutos, meditar, leer alguna noticia en revistas digitales, o pedir salir un poco más temprano de lo habitual para recargar energía. La clave aquí está en la comunicación.
Tomarse un descanso no significa que no harás nada, significa que tendrás tiempo para ti. Aprovecha esto para dejar atrás los pendientes, salir a tomar un café, una larga caminata, disfrutar de una buena sesión de ejercicio en el gym, ir de compras, o simplemente, dormir.
A veces, todo lo que uno necesita es tomarse un día relajante en el que no tengas que pensar en nada y tanto tu mente como tu cuerpo se puedan recargar.