Mantener un peso adecuado es esencial para las articulaciones, en especial para quienes padecen enfermedades reumáticas, pues bajar de peso ayudará a aliviarlas.
Bajar de peso es un reto al que se enfrentan muchas personas, y muchas de ellas no lo logran. Pero así como pueden “bajarse del barco” y rendirse antes de tiempo por falta de motivación o frustración, las personas deben saber que esto depende muchos factores.
El primero de estos factores u obstáculos está relacionado con la genética. Muchos conocemos a personas que comen y no engordan, y otras, que al descuidarse, suben rápido de peso.
El segundo obstáculo que impide que las personas bajemos de peso está relacionado con la dieta y el estilo de vida. Muchas personas con sobrepeso no siguen las recomendaciones y planes alimenticios de sus nutriólogos, además de que no hacen suficiente ejercicio. Y si a este obstáculo le sumamos el estrés, la ansiedad, depresión, o baja autoestima, el resultado será poco positivo.
Por último, el tercer obstáculo está relacionado al ‘efecto yoyo’, es decir, el que padecen las personas que al terminar su dieta, vuelven a comer como antes. Esto es negativo pues incluso hay quienes ganan más peso del que tenían anteriormente.
Es importante llevar una buena alimentación y mantener tu peso porque tener kilos de más implicará una carga para tus articulaciones, en especial porque el tejido graso libera sustancias bioquímicas proinflamatorias que solo favorecen al desgaste de los cartílagos. Así que, si eres una persona con padecimientos en las articulaciones, debes encontrar la forma de perder esos kilos o mantenerlo.
Si consumes la misma cantidad de calorías que gastas, tu peso se mantendrá, pero si ingieres más de las que tu cuerpo realmente necesita, muy probablemente subirás de peso, y este exceso se almacenará como tejido graso.
Así que, si lo quieres es bajar de peso (sobretodo para proteger tus articulaciones), debes cuidar tu alimentación y el ejercicio (para quemar calorías), pero quizá lo más recomendable (primero) sea encontrar la dieta adecuada para ayudarte a perder peso, así que considera que esta debe estar bien equilibrada, así que aléjate de las dietas que excluyen grupos de alimentos.
Una dieta también debe ser adaptada bajo el fundamento de que será el principio de un estilo de vida positivo. Una dieta debe enseñarte a comer, a hacer mejores elecciones alimenticias, y no matarte de hambre. Por ejemplo, una dieta baja en carbohidratos pero alta en proteínas podría ayudarte a bajar rápido de peso.
Algunos expertos en nutrición recomiendan la conocida “dieta mixta reducida en calorías”, ya que es muy equilibrada e incluye todos los nutrientes importantes para una buena alimentación. Una dieta de estas (por ejemplo) es rica en fibra, proteínas, e indica que se deben ingerir pocas grasas.
De la misma forma, si quieres bajar de peso rápido y hacerle un bien a tus articulaciones, debes hacer ejercicio, y esto a mucha gente no le gusta. Pero, hacer ejercicio no requiere que vayas a inscribirte al gimnasio y cargar pesas, sino encontrar la actividad física que te guste y a la que puedas dedicarle tiempo y esfuerzo.
Al hacer ejercicio, los músculos consumirán más energía que el tejido graso, por lo que un cuerpo ejercitado quemará más calorías, incluso en reposo. También debes saber que el cuerpo sigue quemando calorías aún y durante un tiempo después de la actividad física. Solo recuerda que el músculo pesa más que la grasa.
Recuerda que no todas las personas consiguen perder peso tan fácilmente. Como ya lo mencionamos, hay diversos factores que facilitan o que impiden que las personas logren bajar de peso.
Siempre, las mejores opciones serán buscar la ayuda de un nutriólogo, encontrar la dieta adecuada a tu tipo de cuerpo, así como encontrar la actividad física ideal para cuidar tu peso.
Para muchos, la motivación es muy importante, así que también busca la forma de rodearte de personas que te ayuden a lograr esta meta. Incluso, puedes buscar unirte a grupos de corredores, gente que salga a caminar a la misma hora que tú, o hasta unirte a alguna clase de baile o kickboxing, todo con la intención de motivarte.
OJO: Si eres una persona que padece de las articulaciones, la caminata, senderismo, natación, o ciclismo son deportes ideales para ayudarte a perder peso. De lo contrario, algunos otros deportes pueden perjudicar tus articulaciones, así que ten mucho cuidado.